FANTASÍAS
HISTÉRICAS Y SU RELACIÓN CON LA BISEXUALIDAD
- 1908
Ya se sabía respecto de las fantasías
delirantes de los paranoicos o los perversos, que obtenían satisfacción sexual
en la idea, lo nuevo era que en las psiconeurosis se dieran iguales formaciones
psíquicas, sobre todo en la histeria. Freud hallaría una relación entre las
fantasías histéricas y la causación de los síntomas neuróticos.
Los sueños
diurnos juveniles son fuente y modelo de esas fantasías, de igual frecuencia
en ambos sexos, de naturaleza erótica en la mujer, erótica y ambiciosa en el
varón. Esas fantasías son realización de deseos generadas por privación y
añoranza. Los sueños nocturnos son sueños
diurnos desfigurados y mal entendidos por la conciencia. Freud vio en ataques
histéricos la emergencia involuntaria de sueños diurnos, fantasías inconcientes
o concientes que al devenir inconcientes se hacían patógenas y se expresaban en
síntomas.
Son fantasías inconcientes o bien primero concientes
(sueños diurnos olvidados adrede) vueltas inconcientes por la represión: el
contenido pudo variar o no siendo la fantasía inconciente una ramificación de
la conciente. La fantasía inconciente tiene relación con la vida sexual
del sujeto; es idéntica a la que llevó a la satisfacción sexual en período
masturbatorio. El acto masturbatorio tenía dos partes: evocación de la
fantasía y acción de autosatisfacción, formando una soldadura. Originalmente
la acción era un acto autoerótico puro destinado a ganar placer de una zona
erógena. Luego la acción se fusionó con una representación-deseo tomada del
círculo del amor de objeto que sirvió para realizar parcialmente la situación
en que la fantasía culminaba. Si el sujeto renuncia a esa satisfacción masturbatoria fantaseada, la
fantasía conciente deviene inconciente y si no hay otro modo de satisfacción
sexual y no logra sublimar su libido, se dan las condiciones para que la
fantasía inconciente se refresque, difunda y surja como síntoma patológico, al
menos en parte de su contenido.
Las fantasías inconcientes son los estadios
psíquicos previos más próximos a los síntomas histéricos. Estos son fantasías
inconcientes figuradas mediante conversión y en tanto son de carácter somático,
suelen ser elegidas del grupo de sensaciones sexuales e inervaciones motrices
que originariamente acompañaron a la fantasía todavía conciente en esa época. Así
anula el abandono del onanismo y alcanza aunque solo parcialmente, la meta
última del proceso patológico, restablecer la satisfacción sexual en su momento
primaria.
La técnica psicoanalítica permite deducir
desde los síntomas esas fantasías inconcientes y hacer que devengan concientes.
Así observó que el contenido de las fantasías inconcientes de la histeria se
corresponden con situaciones de satisfacción que los perversos llevan a cabo
con conciencia. Las formaciones delirantes del paranoico también son fantasías
de ese tipo pero se hicieron concientes inmediatamente; sus portadores son los
componentes sado-masoquistas de la pulsión sexual. También se pueden hallar sus
correspondientes en ciertas fantasías inconcientes en histéricos. También hay
histéricos que no expresan sus fantasías en síntomas sino en una realización
conciente y fingen atentados, agresiones sexuales.
El nexo de las fantasías con los
síntomas es múltiple y complejo. Un síntoma no corresponde a una única
fantasía inconciente, sino a varias, según ciertas leyes. Tal vez al inicio del
caso clínico no estén desarrolladas todas esas complicaciones. Freud presentó unas
fórmulas que reflejan la naturaleza de los síntomas histéricos.
1. El síntoma histérico es el símbolo
mnémico de vivencias traumáticas eficaces.
2. El síntoma histérico es sustituto por
conversión del retorno asociativo de esas vivencias traumáticas
3. El síntoma histérico es expresión de un
cumplimiento de deseo.
4. El síntoma histérico es la realización
de una fantasía inconciente al servicio del cumplimiento de deseo
5. El síntoma histérico sirve a la
satisfacción sexual correspondiente a un componente de la pulsión sexual
6. El síntoma histérico corresponde al
retorno de una modalidad de satisfacción sexual que fue real en la infancia y
desde entonces fue reprimida.
7. El síntoma histérico nace una formación
de compromiso entre dos mociones pulsionales opuestas
8. El síntoma histérico puede asumir la
subrogación de mociones inconcientes no sexuales, pero no puede carecer de un
significado sexual.
9. Un síntoma histérico es la expresión de
una fantasía sexual inconciente masculina y otra femenina. No supone validez
universal para esta tesis, sino en el estadio más alto de complicación de
determinismo de un síntoma histérico, en neurosis de larga data. El significado
bisexual de síntomas histéricos, mostraría la disposición bisexual que suponía
en los seres humanos. (Ataque histérico donde la paciente con una mano aprieta
el vestido contra el vientre (mujer) y con la otra intenta arrancarlo (varón). Hay
que considerar el significado bisexual de un síntoma para no extraviarse si un
síntoma permanece incólume por más que se haya resuelto uno de sus significados
sexuales. Es que aún se apoya en el significado contrapuesto.
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